El Desapego
Los seres humanos nos apegamos a todo y el aprender el desapego es un proceso difícil y lento para muchos.
Desde muy pequeños nos apegamos a nuestra familia y cosas, aveces por que necesitamos esa seguridad que mamá o papá nos dan y a las cosas por esa misma seguridad que necesitamos o andamos buscando.
Hay muchos tipos de apegos y no quiere decir que todos son malos, pero cuando empezamos a observar el porqué somos tan apegados, entendemos que no es algo tan bueno tampoco.
Años atrás, yo y mi esposo íbamos a un centro de meditación una vez por semana. Aquí fue a donde aprendí que en realidad mi cuerpo no existe, todo esto es la percepción de nosotros mismo y que yo no soy mi cuerpo. Yo soy energía que está dentro de mi cuerpo, y el cuerpo es solo un hogar de esa energía.
Por lo cuál me di cuenta el horror que yo tenía al pensamiento que alguien se iba a morir y el hecho que yo algún día me tenía que ir de este cuerpo. Gracias a la meditación de Kadampa y a Kadamp Morten que me enseño a meditar sobre la muerte y el dejar ir este miedo que tanto yo le tenía. Y así fue poco a poco se me fue quitando el apego que le tenía al cuerpo y a los demás.
Entendiendo que no somos este cuerpo, somos energía ilimitada.
Desde que empecé el minimalismo aprendí que yo era una persona súper apegada a las cosas materiales, aunque yo pensaba que era alguien súper independiente.
Cuando empecé a dejar ir las cosas materiales, me di cuenta lo difícil que era el dejar ir estas cosas. Aunque ya no estaba apegada a mi cuerpo, ahora estaba apegada a las cosas materiales. Fue todo un reto el aprender a dejar ir y saber que es mejor que alguien más lo use, a tan solo tenerlo guardado y sin uso.
Ya llevo tres años y medio de ser minimalista y si claro que ahora se me hace más fácil el dejar ir y más cuando lo regalo a alguien que en realidad lo aprecia y lo va a usar.
He entendido que el apego para mi no es bueno, que me traía mucha ansiedad, ahora que dejo ir, he aprendido que todo fluye, que todo es una energía y que no quiero que esté estancada dentro de mi o mi casa.
Como dije anteriormente el desapego es un proceso largo y difícil, pero siempre recuerda todas las memorias que tenemos nunca se van a ir. Las memorias se quedan en nuestro corazón.